lunes, 11 de febrero de 2008

Los diez días de Victoria.

Ya van 10 días de Victoria.
Todavía está en el Hospital, en la sala de neonatos. Pero ya lleva unos días fuera de la incubadora, en una cuna y simplemente monitorizada con sus pulsaciones y otro parámetro que no sé que significa, pero sí como se lo toman (le ponen una luz roja en la planta del pie y un sensor en el empeine, espero que alguna de las enfermeras me lo explique:-D). Por cierto, hay que agradecer el trabajo de todo el grupo de enfermeras, ayudantes, ... de esta sección. Es increible como se vuelcan con los niños y están en todo momento pendientes tanto de los padres como de los pequeños. Un abrazo a todas y a algún chico, que también los hay.

Victoria en las manos de Pili

La pequeña ya pesa 2.240 Kg y ha recuperado el peso perdido en los primeros días. Se comporta como una campeona y ha salido completamente a sus padres: tiene el genio de la madre y se pasa el día dormiendo como el padre. También tiene un apetito voraz. No tiene suficiente y siempre pide un poquitito mas :-D. Y como todos los bebés tiene problemas con los gases. Y cuando los tiene se entera toda la sala, el piso de arriba y el de abajo. Llegar no llegará a la Laboral, pero casi.
Victoria en mis manos (magnifica foto de Pili)

Victoria no está sola. Ya ha hecho una amiguita que nació pocas horas despues de ella. Se llama Carlota y sigue casi los mismos pasos que Victoria. Incluso pesan y engordan día a día casi lo mismo. Todos los días nos vemos los padres (Alejandro y Claudia) en la sala contigua a la de neonatos, esperando a que nos dejen entrar.

También hay un montón de niños esperando a que lleguen sus padres. Y las cosas como son, unos llegan todos o casi todos los días y otros no. Te da bastante pena ver criaturas sin el amor de sus padres y sin la esperanza de vivir el resto de su vida mejor que en la incubadora. La vida es dura.

Pero no nos pongamos tristes.

Día a día vamos descubriendo cosas nuevas. Tanto ella como nosotros. Al principio tuvo que aprender a tomar la leche tanto de Pili como del biberón. Y nosotros a darselo. Y a cambiarla, limpiarla, sacarle los gases... cosas que crees que son fáciles y que lo son cuando te lo enseñan tan bien como nos han enseñado en Neonatos. Siempre te surgen dudas, pero creo que ya es aprender a ser padres y esto no se termina de aprender nunca.

Vista desde la Sala de Neonatos, al anochecer.

Estamos viviendo momentos intensos y sobre todo muy cansados. Desde que nació estamos subiendo al Hospital unas cuatro o cinco veces, cada tres horas. Eso hace un montón de veces. Con el nerviosismo de solo tener una hora para darle de comer y cuidarla por nosotros mismo y disfrutar un poco de ella.

Estamos deseosos de tenerla ya con nosotros. Esperamos que en pocos días.

Ya os contaremos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Enhorabuena compañero ;)

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